martes , 19 marzo 2024

Glifosato y Salud en Argentina

Print Friendly, PDF & Email
http://www.reduas.com.ar/wp-content/uploads/2011/04/primer-informe.pdf

Las personas en Argentina, que viven en zonas de cultivo de soja y maíz Geneticamente Modificados, GM, transgénicos, sufren abortos involuntarios tres veces mas y defectos al nacimiento el doble de la tasa promedio nacional, según un estudio reciente. Además, el estudio encontró una correlación entre una alta exposición ambiental al glifosato y una mayor frecuencia de trastornos reproductivos (aborto involuntario y defectos de nacimiento).

La investigación fue dirigida por el doctor Medardo Avila-Vazquez, un médico que ha encabezado investigaciones sobre la salud de las poblaciones expuestas al herbicida de glifosato que se pulveriza en soja y maíz tolerantes al glifosato OGM, y se llevó a cabo en la ciudad de Monte Maíz, una ciudad del sureste de la provincia de Córdoba, en el departamento Unión, en Argentina.

El estudio se dividió en dos partes: un estudio epidemiológico que consiste en una encuesta de hogares que investiga la incidencia de aborto involuntario y defectos de nacimiento; y un análisis ambiental, que registra las diversas fuentes de contaminación local y mide los niveles de pesticidas de uso común en el suelo, el agua y las pilas de cáscaras de granos almacenados. Los pesticidas medidos fueron glifosato, su metabolito AMPA y clorpirifos, endosulfán, cipermetrina, atrazina, 2,4-D y epoxiconazol. Estos fueron elegidos porque se usan comúnmente en cultivos en la región.

Los autores señalan que en Monte Maíz, los cultivos de soja y maíz GM usan 10 kilogramos de glifosato por hectárea por año. En la región en su conjunto, se pulverizan 650 toneladas de glifosato y 975 toneladas de todos los pesticidas cada año. En el análisis ambiental, se encontró glifosato en el 100% de las muestras de cáscara de grano y suelo. La concentración fue 10 veces mayor que la de los otros pesticidas estudiados (3868 ppb), en comparación con el endosulfan II (337.7 ppb) y el clorpirifos (242 ppb). Se encontró que la contaminación con glifosato y, en menor medida, con otros pesticidas, es el contaminante ambiental predominante en Monte Maíz. La tasa de aborto involuntario en Monte Maíz durante 5 años (10%) fue tres veces mayor que la reportada en un análisis nacional realizado en 2005 para el Ministerio de Salud Nacional y también más alta que la encontrada en una encuesta de salud social realizada en 2016 por el mismo Equipo de investigadores de un barrio cordobés, según el artículo publicado.

Los autores señalan que este aumento en la prevalencia es consistente con los hallazgos de un estudio previo que detectó una tasa de aborto involuntario del 19% en el pueblo agrícola de Las Vertientes (Córdoba, a 180 km de Monte Maiz). Además, el estudio de salud familiar de las granjas de Ontario encontró una tasa de aborto espontáneo de 18.7% en las familias de granjas, con un riesgo significativo de exposición preconcepcional al glifosato.

En Monte Maiz, ni la edad materna, ni el tabaquismo ni la pobreza podrían explicar la alta tasa de aborto involuntario. Los defectos de nacimiento identificados en el estudio incluyen anomalías del sistema nervioso, genitales, extremidades, riñones y sistema urinario, sistema digestivo, anomalías del corazón y labio leporino. Los autores advierten que la investigación, en común con todos los estudios epidemiológicos, muestra una correlación entre la exposición al glifosato y el daño reproductivo, pero no prueba un vínculo causal. Los enlaces causales solo se pueden mostrar mediante estudios controlados en animales. La investigación apareció en el mismo mes que un estudio con sede en Indiana, EE. UU., Que correlacionó la exposición al herbicida con glifosato con una menor duración del embarazo.

Descagar estudio desde http://www.reduas.com.ar/wp-content/uploads/2011/04/primer-informe.pdf

17 razones más, para prohibir el glifosato

1. En los últimos 20 años, ha habido un aumento alarmante de enfermedades graves en los EE. UU., Junto con una marcada disminución de la esperanza de vida (Bezruchka, 2012).

2. La aparición de enfermedades graves está apareciendo en poblaciones cada vez más jóvenes: enfermedades neurológicas (Pritchard et al., 2013); obesidad, asma, problemas de comportamiento y aprendizaje y enfermedades crónicas en niños y adultos jóvenes (Van Cleave et al., 2010); diabetes tipo II en la juventud (Rosenbloom et al., 1999).

3. La tasa de enfermedades crónicas en toda la población de EE. UU. Ha aumentado dramáticamente, ya que se estima que el 25% de la población de EE. UU. Padece múltiples enfermedades crónicas (Autoimmunity Research Foundation, 2012).

4. Durante este mismo período de tiempo, ha habido un aumento exponencial en la adopción de cultivos de Alimentos Genéticamente Modificados (OGM) con aplicaciones asociadas de glifosato a cultivos de alimentos (Benbrook, 2012).

 5. Se detectó glifosato y su producto de degradación, ácido aminometilfosfónico (AMPA) en el aire (Majewski et al., 2014, Chang et al., 2011), lluvia (Scribner et al., 2007, Majewski, 2014), agua subterránea ( Scribner, 2007), agua de superficie (Chang, 2011; Scribner, 2007; Coupe et al., 2012), suelo (Scribner, 2007) y agua de mar (Mercurio et al., 2014). Estos estudios muestran que el glifosato y el AMPA persisten en el suelo y el agua y que las cantidades detectadas aumentan con el tiempo a medida que aumenta el uso agrícola.

6. Los residuos de glifosato son altos en nuestros alimentos (Bohn et al., 2014).

 7. El glifosato se bioacumula en órganos y tejidos (Kruger et al, 2014).

8. La conexión entre el glifosato y la enfermedad crónica se ha descrito en un artículo de revisión reciente de Samsel & Seneff (2013a).

9. Las tendencias temporales del aumento de enfermedades crónicas junto con el aumento del uso de glifosato, y la adopción de cultivos OGM muestra correlaciones muy altas con una significación estadística muy fuerte (Swanson, 2013).

10. Se ha demostrado que el glifosato es tóxico para el hígado y los riñones (Cattani et al., 2014; Jayasumana et al., 2014; Lushchak et al., 2009; El-Shenawy, 2009; de Liz Oliveira Cavalli et al., 2013; Séralini et al., 2011).

11. El glifosato es un agente quelante patentado (patente de EE.UU. número 3160632 A) que causa deficiencias minerales.

12. El glifosato es un antimicrobiano y biocida patentado (patente estadounidense número 20040077608 A1 y patente estadounidense número 7771736 B2), mata preferentemente bacterias benéficas en nuestros intestinos, lo que conduce a deficiencia de nutrientes, inflamación de enfermedades intestinales crónicas y enfermedades autoinmunes (Samsel y Seneff). , 2013b; Kruger, 2013; Shehata et al., 2012; Carman et al., 2013).

13. El glifosato conduce a la teratogenicidad y la toxicidad reproductiva en vertebrados (Antoniou et al., 2012).

14. El glifosato es un disruptor endocrino (Gasnier et al., 2009; Paganelli et al., 2010; Antoniou et al., 2012; Thongprakaisang et al., 2013).

15. No hay niveles «seguros» de disruptores endocrinos (Vandenberg et al., 2012; Bergman et al., 2013).

16. Los desequilibrios y las disfunciones del sistema endocrino pueden provocar diabetes, hipertensión, obesidad, enfermedad renal, cáncer de mama, próstata, hígado, cerebro, tiroides, linfoma no Hodgkin (Marc y otros, 2004; Thongprakaisang y otros. , 2013), osteoporosis, síndrome de Cushing, hipertiroidismo e hipertiroidismo, infertilidad, defectos de nacimiento, disfunción eréctil (Soto y Sonnenschein, 2010), problemas de desarrollo sexual y trastornos neurológicos como: discapacidades de aprendizaje, trastorno por déficit de atención (de Cock et al ., 2012), autismo (Schulkin, 2007), demencia (Ghosh, 2010), Alzheimer (Merlo et al., 2010), Parkinson y esquizofrenia (MacSweeney et al., 1978).

 17. Los disruptores endocrinos son especialmente dañinos para los organismos que sufren cambios hormonales: fetos, bebés, niños, adolescentes y ancianos (Bergman et al., 2013).

Fuentes de información

Tipping the Balance of Autism Risk: Potential Mechanisms Linking Pesticides and Autism https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3404662/

Maternal residence near agricultural pesticide applications and autism spectrum disorders among children in the California Central Valley. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/17938740

Exposición ambiental al glifosato y los impactos en la salud reproductiva de la población agrícola de Argentina http://www.scirp.org/Journal/PaperInformation.aspx?PaperID=83267

Antoniou, M., Habib, M.E.M., Howard, C.V., Jennings, R.C., Leifert, C., Nodari, R.O., Robinson, C.J. and Fagan. J., 2012. Teratogenic Effects of Glyphosate-Based Herbicides: Divergence of Regulatory Decisions from Scientific Evidence. Journal of Environmental and Analytical Toxicology, S:4. http://earthopensource.org/files/pdfs/Roundup-and-birth-defects/Antoniou-TeratogenicEffects-of-Glyphosate-Based-Herbicides.pdf

Autoimmunity Research Foundation., 2012. Incidence and prevalence of chronic disease. Autoimmunity Research Foundation. http://mpkb.org/home/pathogenesis/epidemiology

Benbrook, C.B., 2012. Impacts of genetically engineered crops on pesticide use in the U.S. — the first sixteen years. Environmental Sciences Europe, 24(24): 2190-4715. http://www.enveurope.com/content/24/1/24

Bergman, A., Heindel, J.J., Jobling, S., Kidd, K.A. and R. Zoeller, T. (eds.), 2013. State of the science of endocrine disrupting chemicals 2012, United Nations Environment Programme and the World Health Organization, ISBN: 978-92-807-3274-0 (UNEP) and 978 92 4 150503 1 (WHO) (NLM classification: WK 102)

Bezruchka, S., 2012. The Hurrider I Go the Behinder I Get: The Deteriorating International Ranking of U.S. Health Status. Annual Review of Public Health, 33: 157-173. http://www.annualreviews.org/eprint/iESYF775U2MwVfrxfAR2/full/10.1146/annurevpublhealth-031811-124649

Bøhn, T., Cuhra, M., Travail, T., Sanden, M., Fagan, J. and Primicerio, R., 2013. Compositional differences in soybeans on the market: glyphosate accumulates in Roundup Ready GM soybeans. Food Chemistry. 153:207-15.

Carman, J. A., Vlieger, H.R., Ver Steeg, L.J., Sheller, V.E., Robinson, G.W., Clinch-Jones C.A., Haynes, J.I., John, W. and Edwards, J.W., 2013. A long-term toxicology study on pigs fed a combined genetically modified (GM) soy and GM maize diet, Journal of Organic Systems, 8(1): 38-54. http://www.organic-systems.org/journal/81/8106.pdf

Cattani, D., de Liz Oliveira Cavalli, V.L., Heinz Rig, C.E., Dominguez, J.T., Dal-Cim, T., Tosca, C.I., Mena Barreto Silva, F.R. and Zamoner, A,. 2014. Mechanisms underlying the neurotoxicity induced by glyphosate-based herbicide in immature rat hippocampus: Involvement of glutamate excitotoxicity. Toxicology. 2014 Mar 15;320C:34-4 http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/24636977

Chang, F.C., Simcik, M.F. and Capel, P.D., 2011. Occurrence and fate of the herbicide glyphosate and itsdegradate aminomethylphosphonic acid in the atmosphere. Environmental Toxicology and Chemistry, 30(3): 548-55.

Coupe, R.H., Kalkhoff, S.J., Capelc, P.D., and Gregoired, C., 2012. Fate and transport of glyphosate and aminomethylphosphonic acid in surface waters of agricultural basins. Pest Management Science, 68(1): 16-30. http://onlinelibrary.wiley.com/enhanced/doi/10.1002/ps.2212#Survey

de Cock, M., Maas, Y.G. and van de Bor M., 2012. Does perinatal exposure to endocrine disruptors induce autism spectrum and attention deficit hyperactivity disorders? Acta Paidiatric, 101(8): 811-819. Abstract: http:// www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/22458970

de Liz Oliveira Cavalli, V.L., Cattani, D., Heinz Rieg, C.E., Pierozan. P., Zanatta. L., Benedetti Parisotto, E., Wilhelm Filho, D., Mena Barreto Silva, F.R. and Pessoa-Pureur R,Zamoner, A,. 2013. Roundup disrupts male reproductive functions by triggering calcium-mediated cell death

El-Shenawy, N.S., 2009. Oxidative stress responses of rats exposed to Roundup and its active ingredient glyphosate. Environmental Toxicology and Pharmacology. 28(3):379- 85.

Gasnier, C., Dumont, C., Benachour, N., Clair, E., Chagnon, M.C. and Séralini, G.E., 2009. Glyphosate-based herbicides are toxic and endocrine disruptors in human cell lines. Toxicology, 262(3): 184-191. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/19539684

Ghosh, A., 2010. Endocrine, metabolic, nutritional, and toxic disorders leading to dementia. Annals of Indian Academy of Neurology, (Suppl 2): S63-8. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/ pubmed/21369420

Jayasumana, C., Gunatilake, S. and Senanayake, P., 2014. Glyphosate, Hard Water and Nephrotoxic Metals: Are They the Culprits Behind the Epidemic of Chronic Kidney Disease of Unknown Etiology in Sri Lanka? International Journal of Environmental Research and Public Health, 11, 2125-2147;

Krüger, M., Shehata, A.A., Schrödl, W. And Rodloff, A., 2013a. Glyphosate suppresses the antagonistic effect of Enterococcus spp. On Clostridium botulinum. Anaerobe, 20: 74- 78. Krüger, M., Schledorn, P., Schrödl, W., Hoppe, H.W., Lutz, W. and Shehata, A.A., 2014. Detection of Glyphosate Residues in Animals and Humans. Journal of Environmental and Analytical Toxicology, 4(2): 210-15.

Lushchak, O.V., Kubrak, O.I., Storey, J.M., Storey, K.B. and Lushchak, V.I., 2009. Low toxic herbicide Roundup induces mild oxidative stress in goldfish tissues. Chemosphere. 76(7):932-7.

MacSweeney, D., Timms, P. and Johnson A., 1978. Preliminary Communication Thyroendocrine pathology, obstetric morbidity and schizophrenia: survey of a hundred families with a schizophrenic proband. Psychological Medicine, 8(1): 151-155. Abstract: http://journals.cambridge.org/action/displayAbstract? fromPage=onlineandaid=4985600andfulltextType=RAandfileId=S0033291700006735

Marc, J., Mulner-Lorillon, O. and Bellé, R., 2004. Glyphosate-based pesticides affect cell cycle regulation, Biology of the Cell, (2004) 96(3): 245-9.

Majewski, M.S., Coupe, R.H., Foreman, W.T. and Capel, P.D., 2014. Pesticides in Mississippi air and rain: a comparison between 1995 and 2007. Environmental Toxicology and Chemistry, E-pub ahead of print, http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/ 24549493

Merlo, S., Spampinato, S., Canonico, P.L., Copani, A. and Sortino, M.A., 2010. Alzheimer’s disease: brain expression of a metabolic disorder? Trends in Endocrinology and Metabolism, 21(9): 537-544. http://www.cell.com/trends/endocrinology- metabolism//retrieve/pii/S1043276010000792

Mercurio P, Flores F, Mueller JF, Carter S, Negri AP. Glyphosate persistence in seawater. Mar Pollut Bull. 2014 Jan 24. pii: S0025-326X(14)00022-8. doi:10.1016/j.marpolbul.2014.01.021.

Paganelli, A., Gnazzo ,V., Acosta, H., López, S.L. and Carrasco, A.E., 2010. Glyphosatebased Herbicides Produce Teratogenic Effects on Vertebrates by Impairing Retinoic Acid Signaling. Chemical Research in Toxicology, 23 (10): 1586–1595. Abstract: http:// pubs.acs.org/doi/abs/10.1021/tx1001749

Pritchard, C., Meyers, A., and Baldwin, D., 2013. Changing patterns of neurological mortality in the 10 major developed countries.– 1979-2010. Public Health, 127(4): 357-368. http://dx.doi.org/10.1016/j.puhe.2012.12.018

Rosenbloom, A.L., Joe, J.R., Young, R.S. and Winter, W.E., 1999. Emerging epidemic of type 2 diabetes in youth. Diabetes Care, 22(2):345-54. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/10333956

Samsel, A. and Seneff, S., 2013a. Glyphosate’s Suppression of Cytochrome P450 Enzymes and Amino Acid Biosynthesis by the Gut Microbiome: Pathways to Modern Diseases. Entropy, 15(4): 1416-1463. http://www.mdpi.com/1099-4300/15/4/1416 (Viewed: 20 April 2013)

 Samsel, A. and Seneff, S., 2013. Glyphosate, pathways to modern diseases II: Celiac sprue and gluten intolerance. Interdisciplinary Toxicology, 6(4): 159–184. http://onlinelibrary.wiley.com/enhanced/doi/10.1002/ps.2212#Survey

Schulkin, J., 2007. Autism and the amygdala: An endocrine hypothesis. Brain and Cognition, 65(1): 87–99. Abstract: http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0278262607000656 (Viewed: 18 February 2013)

Scribner, E.A., Battaglin, W.A., Gilliom, R.J. And Meyer, M.T., 2007 Concentrations of glyphosate, its degradation product, aminomethylphophonic acid, and glufosinate in ground- and surface-water, rainfall, and soil samples collected in the United States, 2001-06S. Geological Survey Scientific Investigations Report 2007-5122: 111 pages.

Seralini, G.E., Mesnage, R., Clair, E., Gress, S., de Vendomois, J. and Cellier, D., 2011. Genetically modified crops safety assessments: present limits and possible improvements. Environmental Sciences Europe, 23: 10. http://www.enveurope.com/content/23/1/10 (Viewed: 15 November 2013)

Shehata, A.A., Schrodl, W., Aldin, A.A., Hafez, H.M. and Kruger, M., 2012. The Effect of Glyphosate on Potential Pathogens and Beneficial Members of Poultry Microbiota In Vitro. Current Microbiology, 66(4):350-8. Abstract: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/23224412

Soto, A.M. and Sonnenschein, C., 2010. Environmental causes of cancer: endocrine disruptors as carcinogens, Nature Reviews Endocrinology. 6: 363-370. Abstract http:// www.nature.com/nrendo/journal/v6/n7/full/nrendo.2010.87.html (Viewed: 15 November 2013)

Swanson, N.L., 2013. Genetically Modified Organisms and the deterioration of health in the United States. http://sustainablepulse.com/wp-content/uploads/GMO-health.pdf Thongprakaisang, S., Thiantanawat, A., Rangkadilok, N., Suriyo, T. and Satayavivad, J., 2013. Glyphosate induces human breast cancer cells growth via estrogen receptors, Food and Chemical Toxicology, 59: 129-136. http://dx.doi.org/10.1016/j.fct.2013.05.057

Van Cleave, J., Gortmaker, S.L. and Perrin, J.M., 2010. Dynamics of obesity and chronic health conditions among children and youth. Journal of the American Medical Society, 303(7): 623-30. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/20159870 (Viewed: 9 February 2013)

Vandenberg, L.N., Colburn, T., Hayes, T.B., Heindel, J.J., Jacobs, D.R. Jr., Lee, D., Shioda, T., Soto, A.M., vom Sal, F.S., Welshons, W.V., Zeller, R.T. and Myers, J.P., 2012. Hormones and Endocrine-Disrupting Chemicals: Low-Dose Effects and Nonmonotonic Dose Responses. Endocrine Reviews, 33 (3): 378-455. http://edrv.endojournals.org/content/33/3/378.full